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Cueva de Antoniana, paraje de El Negrón, Gilena

Esta necrópolis es uno de los escasos ejemplos de enterramientos en cueva artificial del calcolítico, ya que en esa época lo habitual era el uso de los dólmenes. En el entorno más próximo se han descubierto otros sepulcros semejantes en Lora de Estepa, Pedrera o Alameda. También se encuentran algunos cerca de Lisboa, pero son muy escasos. Este tipo de enterramientos suelen estar excavados en las margas arcillosas, casi calizas.


La presencia en el yacimiento de materiales desvinculados al medio local como marfil, metales o conchas marinas, nos previene de una población con una economía compleja, ligada posiblemente a la utilización de los recursos líticos o canteras con fines no solamente domésticos, sino comerciales.


La importancia del yacimiento y su alto valor científico, ha hecho posible la recuperación de un enclave que encontraba en un deplorable estado, y puesta en valor con la correspondiente infraestructura de protección y accesos al conjunto.


Los trabajos se realizaron bajo la supervision de David Ruíz García, arqueólogo y conservador de la Colección Museográfica de Gilena y responsable del Servicio Municipal de Arqueología de dicho municipio.

Descubierta casualmente en 1985, esta “cueva artificial” se conforma por una cámara central abovedada, cuatro nichos abiertos a esta cámara y un corredor escalonado de entrada. Se trata de una estructura excavada y tallada en el subsuelo con fines sepulcrales.


Junto a la Cueva recuperada, se encontraban otras dos cuevas, en peor estado, que una vez limpias de vegetación, han sido selladas y protegidas para evitar su deterioro y vandalismo.



Según afirma David Ruiz García, “la idea era hacerla visitable ya que es la cueva artificial calcolitica más monumental y mejor conservada de Europa, además es un complemento a la visita de la Colección Museográfica ya que posee el ajuar completo en su exposición permanente”

La Necropolis fue excavada en 1985, año en el que las piezas fueron llevadas al Museo de la capital hispalense. 30 años después volvieron a Gilena, después de la correspondiente restauración, y pueden contemplarse en la nueva Colección Museografica de Gilena, en un montaje de la denominada "Sala de la Muerte"


Este ajuar tiene una extraordinaria riqueza, y está formado por objetos de la vida cotidiana: vasos cerámicos, cuchillos, punzones realizados en piedra (sílex), hueso o metal, armas de piedra o metal (puntas de flecha y hachas), adornos personales, piezas con un significado religioso como son ídolos realizados en huesos de animales y por último varias piezas, entre ellas un adorno en forma de bellota, realizadas en marfil.




“La restauración de la cueva resultó complicada debido a que sus paredes se encuentran compuestas por margas arcillosas muy delicadas” recalca el Responsable conservador de la Colección, David Ruíz “


Para proteger el enclave y ponerlo en valor, el Servicio Municipal de Arqueología realizó una intervención mediante eliminación de estructura anterior de protección, por otro recinto que lo conservara en humedad y temperatura constantes y óptimas para la adecuada conservación preventiva de la Necrópolis.




Una vez recuperado el enclave, puede conocerse mediante visitas concertadas, para lo cual los interesados pueden ponerse en contacto con la Colección Museográfica de Gilena, llamando al teléfono 954 49 23 03.


En el marco de la campaña de divulgación del patrimonio local, se han realizado diversas recreaciones de la vida y usos de la cueva, contando con vecinos de Gilena.


El ayuntamiento, ha realizado un gran esfuerzo, para que la Colección Museográfica cuente con unas instalaciones a la altura de la importancia arqueológica de la Cueva de Antoniana, estudiando diferentes espacios expositivos de referencia en el ámbito europeo. Dicha colección esta abierta al público en la Plaza Virgen de los Dolores, 3, de Gilena.


La Colección Museográfica de Gilena es una institución museística pertenecientes a Registro de Museos y Colecciones Museográfica de Andalucía; siendo la primera institución de estas características creada en suelo Andaluz, y la segunda del territorio español.

No solo es un lugar de exposición, sino un espacio donde la historia cobra vida ante los ojos del visitante, mediante la realización de múltiples actividades.



Constituye un referente en la puesta en valor, investigación, protección y divulgación del Patrimonio Histórico en Andalucía. También es miembro institucional del Consejo Internacional de Museos (ICOM) con sede en París.


En definitiva, la Cueva de Antoniana junto a la Colección Museográfica de Gilena, es un modelo de éxito en la apuesta por la recuperación del patrimonio local, y de cómo pequeñas iniciativas pueden conseguir grandes resultados.



FOTOGRAFIAS: Colección Museográfica de Gilena





22 de marzo de 2017

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