La regularidad observable en buena parte de los lagares de Cazalla de la Sierra, se ha perdido en este edificio, siendo difícil distinguir el desarrollo longitudinal real que se da a partir de los elementos bases, por el encubrimiento originado por los sucesivos añadidos (observable en la irregularidad de sus cubiertas). Interiormente, el resultado es una aparente desorganización: la nave de viga se sitúa en medio con la vivienda del propietario con doble planta a sus pies, en una disposición transversal que sobresale por uno de los extremos del ancho de la nave.

El uso actual como hospedaje ha acrecentado la complejidad de este edificio (utilización de la nave de prensa para apartamentos, transformación de las cuadras y bodegas en salones, etc.), haciendo que hoy sea difícil reconocer su estructura originaria.

Fuente: Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico. Consejería de Educación, Cultura y Deporte.